Descripción

El reinado de Alfonso VI de León, también monarca de Castilla y de Galicia, una figura trascendental en la Edad Media española ensombrecida por la leyenda cidiana y su antagonismo con el Campeador en el Cantar de mio Cid, marca un punto de inflexión en la historia de la Península. La unión de todos estos territorios bajo la mano de un único soberano, y todo en una coyuntura de debilidad de al-Ándalus, dividido a la sazón en numerosos reinos taifas, generó un desequilibrio de poder tal que redujo a los estados andalusíes a meros vasallos tributarios de sus vecinos septentrionales. Alfonso también aprovechó para extender las fronteras y conquistar, entre otras, la importantísima ciudad de Toledo. Pero, alarmados, los andalusíes llamaron en su auxilio al poderoso imperio almorávide del norte de África, y se produjo una invasión de tal gravedad que frenó en seco la expansión cristiana y obligó a sus gobernantes a adoptar, nuevamente, una estrategia defensiva.